Los calabacines gratinados son un plato versátil que puede servir como entrada o plato principal. La combinación de calabacín, maíz, leche, y queso gratinado crea una textura cremosa y un sabor delicioso. Perfecto para compartir en cualquier ocasión. Una opción vegetariana que sorprenderá a todos.
Los calabacines se preparan en rebanadas y se mezclan con una suave crema de maíz, leche y cebolla salteada.
Se hornean con queso hasta que queden gratinados y dorados.
Una delicia de sabor suave y textura cremosa que seguro encantará a todos.
Ingredientes
2 Calabacines grandes
1 Cebolla finamente picada
3 Dientes de ajo triturados
1 lata de Maíz dulce
1 taza de Leche
Queso parmesano
1 cuchara de Harina
2 cucharas de Mantequilla
1 pizca de Sal
1 pizca de Pimienta
Preparación
Paso 1 : Los calabacines se lavan y se rebanan.
Paso 2 : En una olla al fuego, se derrite la mantequilla y se saltea la cebolla con el ajo hasta que queden transparentes.
Paso 3 : Se añade el maíz dulce, la leche y la harina disuelta.
Paso 4 : Se condimenta con sal y pimienta, y se cocina sin dejar de remover hasta que la crema espese.
Paso 5 : En un molde refractario engrasado con mantequilla, se coloca una capa de crema, luego se cubre con los calabacines y encima se añade queso.
Paso 6 : Se repite el mismo procedimiento.
Paso 7 : Se hornea por 30 minutos hasta que gratinen.